LA MITAD DE LOS PORTEÑOS DAN ASCO

FITO PÁEZ

    Es lo que dijo nuestro genial músico rosarino Fito Paez después de las elecciones del domingo. No creí divertirme tanto con la polémica que levantó. Me fascina cómo un sólo hecho puede ser tan visto y comentado en formas tan extremas.

    Por un lado hay porteños que se sienten tocados por la discriminación, por no respetarles su derecho a libertad de elegir, y por otro están los periodistas que compadecen a Fito por ser víctima de una campaña en su contra. Dicen que él es un artista sensible que solamente ejerció el derecho de expresar su opinión.

   Leí su carta publicada en Página Doce y me pregunto si se equivocó en grande porque ...¿no será que está describiendo la sociedad capitalista?. La misma que él acepta y forma parte.
Las diferencias sociales,¿ lo sabrá el señor Fito?, no existen sólo en la Capital Federal argentina, sino en todo el país desde que se hizo la repartija de tierras hace más de un siglo atrás. (Podría leer a Eduardo Galeano, el muchacho)

QUIÉN SABE QUÉ ES LA DERECHA Y LA IZQUIERDA
   El músico habla de derecha. Los que que no quieren al gobierno actual son de derecha. Me gustaría que haga una encuesta a los argentinos y que pida que definan qué es la derecha, el centro y la izquierda. Se va a llevar una sorpresa. Muchos no tienen idea ni les interesa de qué se trata, y no son justamente quienes viven en esta ciudad. Por otra parte, si la definimos, pregunto a los que se llaman peronistas...¿Perón de qué lado estaba?

ACEPTO EL CAPITALISMO PERO DIGO QUE LO ABORREZCO
   Me causan mucha risa algunos comentarios.Hay tantos periodistas y políticos que se sienten distintos y hablan y critican mal con cierta diferencia a mucha gente, a la que tildan de indiferentes, pareciera como que tener trabajo digno y disfutar de tu salario es mala palabra. Pero no los veo a ellos viviendo en alguna villa de emergencia porteña, ni usando colectivo, ni mandando a sus chicos a la escuela pública. También me pregunto cuántos de los que "sienten asco" pueden levantar la mano y asegurar que dedican su vida a los más necesitados.

   En esta época de tanta globalización y consumismo, probablemente la mayoría se preocupa por sobrevivir, por cuidar a su familia, amigos, y también sí se ocupa de mucha gente necesitada. Cuántas fundaciones y cuánta gente particular se encargan de dar de comer a muchísmas familias, de colaborar con lo que se puede.

   Como tantos, tendemos a juzgar a los demás, y nos olvidamos de lo que tenemos en el ropero.