“El niño no es una botella que hay que llenar sino un fuego que es preciso encender”-Montaigne-

Publicado en el Boletín Salesiano-Colegio Pío IX- Agosto 2014

  LA EDUCACIÓN TRADICIONAL. Sus consecuencias en Argentina las vemos en nosotros mismos todos los días.  A mi parecer tiene mucho de negativo pero tampoco todo. Hasta hace 20 años atrás todos éramos educados con este tipo de escuela. Luego se instruyó a los docentes con la teoría del constructivismo de Jean Piaget y se cambió absolutamente la forma de encararla. Pero con el tiempo se la comenzó a cuestionar. Y actualmente hay una serie de corrientes pedagógicas enfrentándose entre sí.

El dibujo que publiqué es muy gráfico porque refleja sin ninguna duda los métodos tradicionales de enseñanza en el país. Aunque hoy en muchas escuelas se encare la educación desde una perspectiva más constructivista, hay otras que aún siguen en los viejos sistemas. Por lo menos lo he comprobado en muchas escuelas de la Ciudad de Buenos Aires.
 ¿Cuál será el mejor? ¿Un poco de aquí y un poco de allá será la respuesta? Porque los docentes sabemos que ningún método es absoluto y bueno por sí solo.

Creo que para hablar de EDUCACIÖN primero tendríamos que hablar de un mayor presupuesto nacional destinado a la educación, ese sería el camino a seguir en un principio.
Con un presupuesto respetable habría edificios saludables, recursos didácticos necesarios  y docentes bien pago. Así es mucho más fácil de encarar el modelo de escuela que queremos para nuestros niños y jóvenes.

Y con respecto a la crítica a los distintos métodos, adhiero a esta frase maravillosa del filósofo y político francés Michel de Montaigne:
"El niño no es una botella que hay que llenar sino un fuego que es preciso encender”.