miércoles, 2 de enero de 2013

EL DISCURSO DE CRISTINA. HAY DOS ARGENTINAS.

PRESIDENTE DE ARGENTINA CRISTINA DE KIRCHNER
      Imágenes dispares me vienen cuando leo en la web o en el papel algún resumen de lo que pasó en el 2012 en el país y en el mundo. La imagen más fuerte es sin dudas la de nuestra Presidente de Argentina hablándole al país. Y siempre tengo esa rara sensación de que existe un mundo que describe la presidente que algunos aplauden y otro mundo muy distinto que ven los ojos de otros argentinos.
Aunque yo corregiría la leyenda de tantas fotos publicadas con la protagonista y algún micrófono. Es el discurso de ella, no dirigido al país, sino a quienes sabe que la escuchan, y me duele mucho tener que ponerle etiquetas a sus seguidores de turno. Oportunistas, es lo que me nace decir sobre sus "reidores".

Hablar de lo que significa la política para una simple ciudadana como yo no me alcanzaría este post y probablemente aburriría a los lectores. Pero podría definir los sentimientos que me inspira como lo son la desilusión, la desconfianza, la resignación, la vergüenza, el hastío. No lo describo sin sentir pena porque me gustaría sentirme cómoda y también sentir que cualquier persona como yo puede expresarse e incursionar en la política libremente. Pero resulta que son vox populi los códigos que se manejan en los estratos de la política e indudablemente no nací para desenvolverme en ese submundo, tan necesario para que podamos seguir viviendo en libertad y democracia.
Es por eso que para mí la política en gran parte es educar bien a mis hijas, futuras ciudadanas responsables de mi país, esa es mi gran misión y espero estar cumpliéndola con honores. Aunque tantas veces la educación que reciben choca sin piedad contra los valores despreciados con que se desenvuelve cada vez más tanta gente de nuestra sociedad.

EL DISCURSO DE CRISTINA KIRCHNER

Cristina y sus guiños a su comitiva

Siento cierta fascinación al ver cómo se puede interpretar el modelo de este gobierno de formas tan opuestas. En un blanco-negro que casi no permite matices.
Casi en forma exponencial se fueron multiplicando los discursos de la Presidente desde que asumió en 2006 su primer gobierno. Ya en su segundo período desde el 2010 se maneja como dueña de las cadenas nacionales casi periódicas, utilizando ese espacio que para el que no lo sabe, se paga con nuestros impuestos y que se supone se utiliza para alguna comunicación que realmente revista importancia, como así lo han hecho los presidentes anteriores. Resulta que aquí, los motivos se fueron transformando hasta llegar a ser casi simples pensamientos en voz alta de la Presidente. Con risas, comentarios sorprendentemente muchas veces subidos de tono y guiños para algún funcionario presente en la comitiva, o simplemente para sus aplaudidores de turno, que sonríen y festejan cada chiste. Aunque nunca falta la emoción y su permanente mención a ÉL, como lo llama sin nombrarlo a su fallecido esposo y ex presidente Néstor Kirchner.
Cristina Fernández de Kirchner

Néstor Kirchner entrega el mando asu esposa Cristina en 2006


Lo que me sorprende aún es la falta absoluta de humildad en sus palabras. Parece que sus asesores le prohiben hablar de las cosas malas y sólo se le permite nombrar lo que para ella son sus aciertos.
Describe una Argentina maravillosa que todos queremos tener.
Lo que no le entra en su raciocinio es que todos los argentinos queremos creerle y queremos tener un país mejor.
Las pocas veces que habló de puntos delicados como la desocupación, la inseguridad, la pobreza o los impuestos a las ganancias, siempre hace referencia a lo que ocurre en otros países, contándonos de lo bien parados que estamos en las comparaciones y las estadísticas.
Lo que no hay forma que exista en su discurso es la sinceridad, el pecado de la soberbia se instaló en sus mensajes y resulta cada vez más difícil escucharla para aquel que no encuentra ningún beneficio visible en su gestión.
El gobierno actual claro que ha mejorado al país desde el 2001, cuando gobernaba Antonio De la Rúa y el país fue un caos, llegando incluso al default. Pero resulta que MEJOR no es sinónimo de BIEN. Que estemos mejor que esa época no es ningún mérito porque habíamos tocado fondo, cualquier medida que nos hiciera crecer un milímetro no fue precisamente un gran éxito. Peor no podríamos estar.

Cristina de Kirchner

Y anunciar descaradamente que el porcentaje de desocupación y pobreza se ha reducido, no es para anunciarlo con orgullo. Particularmente lo anunciaría con dolor y vergüenza, porque no se entiende que haya pobres en un país con clima y tierras tan privilegiadas como tiene este país.
Tampoco entiendo de dónde saca cara para hablar con tanta soltura de que la inseguridad en el país es irrisoria si la comparamos con otros países. Es decir que a quien sufrió un acto delictivo y a quien perdió un ser querido hay que explicarle que se quede tranquilo, que lo que le pasó está apenas en un poco importante porcentaje incomparable con los vandalismos en ciudades extranjeras. Lo que se dice: una cachetada para quienes sufren estos hechos que tristemente son ya rutinarios.
En cuanto al impuesto a las ganancias, critica y habla siempre con desprecio de quienes reciben mejores  sueldos que la media, sin mencionar que el problema no está en los buenos sueldos sino en los pésimos salarios que tienen los trabajadores en general. Desprecia a los empresarios ricos, y jamás insinúa cómo debería llamarse ella que resulta ser millonaria, con emprendimientos hoteleros e inmobiliarios que suman cantidades indecentes de ceros.

Lo que indigna a la mayoría de la gente, excepto a los defensores ciegos "K", es por qué las declaraciones juradas de los bienes personales de los funcionarios de su gobierno aumentan su patrimonio en 200, 300 y 1000 % más desde que iniciaron su gestión.

Si todos los funcionarios, incluídos los Kirchner, han aumentado sus bienes materiales de forma tan llamativa, entonces por qué no utilizan el mismo método para mejorar la economía del país. Seguramente si así lo hicieran sería un éxito, y probablemente estaríamos tirando billetes por la ventana.
Sin embargo, mientras se maquilla y aprecia el botox, y luego afila los micrófonos y piensa en cuánto seduce a sus seguidores, los problemas siguen esperando en una larga lista.

Cristina en su juventud

Cristina según pasan los años (MINUTOAMINUTO.COM)
No me interesa hacer una crítica de su discurso sin tener una propuesta. Es por eso que espero que para este año 2013 que se inicia deseo fervientemente que de algún modo nuestra jefa de Estado baje a tierra y empiece a interpretar lo que realmente ven sus ojos, o más bien que deje su ambición de poder de lado y comience verdaderamente a gobernar para todos los argentinos, no solamente para los pobres que la votan.

Ojalá que no haya más pobres en mi país, ni uno solo. Que aquel que quiere trabajar tenga trabajo, que aquel que quiera estudiar pueda completar sus estudios, que aquel que quiera sobrevivir a este país pueda alimentarse porque es su derecho y pueda vivir sin miedo. Porque de nada sirve tener trabajo y esforzarse en los estudios si un drogadicto termina con nuestros sueños con la rapidez de un balazo. Algo muy difícil de ver para quien vive con los ojos blindados.

FELIZ AÑO NUEVO PARA TODOS,  PAÍS.
FELIZ AÑO NUEVO PARA TODO EL MUNDO.

5 comentarios:

  1. Ohhh, que interesante ha sido leer este artículo. Yo espero ansiosa el volverme también ciudadana canadiense para comenzar a votar, porque aquí tampoco nada es color de rosa

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  2. C0incido totalmente con lo que escribis en tu nota.

    Saludos y FELIZ AÑO NUEVO!!!

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  3. Tal cual,opino lo mismo. Muy interesante la nota, concuerdo con su punto de vista. Saludos y que haya comenzado bien el año, desde Rosario.

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